Y es que ya no es cierto ese mito de que las bodas civiles son más frias o menos bonitas que las bodas religiosas. Ahora existen tantas opciones de celebrar la boda civil que ésta puede ser realmente fantástica. En las bodas civiles a las que he asistido todo era muy diferente entre ellas. Una pareja de amigos celebró la boda en la playa, bueno, más bien con el fondo de la playa, el Mediterráneo en concreto. Contrataron un restaurante con una terrza chill out cubierta que despejaron por el lateral que daba al mar. El oficiante, gran amigo de la pareja, estaba de espaldas al mar y los novios y el resto de invitados lo teníamos como telón de fondo un poco antes de anochecer. La verdad es que fue increíble. Los novios colocaron un pasillo de velas por las dunas hasta el agua y, cuando terminó la celebración, los invitados les lanzaron el arroz y los pétalos de rosa por ese pasillo. Una pequeña barra fuera sirvió para el primer brindis. Pero si prefieres una boda civil en una iglesia también se puede. No es que te vayan a dejar entrar a la de tu barrio o a la catedral de la ciudad a que te case un concejal, eso, a parte de imposible, sería poco respetusoso. La idea es que encuentres una iglesia que haya sido desacralizada y celebres allí tu ceremonia con todo lo imponente que puede resultar una capilla, pero completamente a tu estilo. Debes buscar, pero hay varias ciudades que las tienen y puede ser una buena idea. Sea como sea, lo más importante es que sean los novios quienes decidan qué esperan de su ceremonia y, a partir de ahí, el límite lo ponéis solo vosotros. Fuente Imagen Flickr.Celebrar una boda civil
Está clara la libertad de cada uno para elegir cómo quiere casarse. Aunque muchas parejas optan por la ceremonia religiosa, independientemente de que sean más o menos creyentes, hay otras muchas que prefieren la boda civil.
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alespaes
jueves, 15 septiembre, 2011
Y es que ya no es cierto ese mito de que las bodas civiles son más frias o menos bonitas que las bodas religiosas. Ahora existen tantas opciones de celebrar la boda civil que ésta puede ser realmente fantástica. En las bodas civiles a las que he asistido todo era muy diferente entre ellas. Una pareja de amigos celebró la boda en la playa, bueno, más bien con el fondo de la playa, el Mediterráneo en concreto. Contrataron un restaurante con una terrza chill out cubierta que despejaron por el lateral que daba al mar. El oficiante, gran amigo de la pareja, estaba de espaldas al mar y los novios y el resto de invitados lo teníamos como telón de fondo un poco antes de anochecer. La verdad es que fue increíble. Los novios colocaron un pasillo de velas por las dunas hasta el agua y, cuando terminó la celebración, los invitados les lanzaron el arroz y los pétalos de rosa por ese pasillo. Una pequeña barra fuera sirvió para el primer brindis. Pero si prefieres una boda civil en una iglesia también se puede. No es que te vayan a dejar entrar a la de tu barrio o a la catedral de la ciudad a que te case un concejal, eso, a parte de imposible, sería poco respetusoso. La idea es que encuentres una iglesia que haya sido desacralizada y celebres allí tu ceremonia con todo lo imponente que puede resultar una capilla, pero completamente a tu estilo. Debes buscar, pero hay varias ciudades que las tienen y puede ser una buena idea. Sea como sea, lo más importante es que sean los novios quienes decidan qué esperan de su ceremonia y, a partir de ahí, el límite lo ponéis solo vosotros. Fuente Imagen Flickr.
